Japoniarrak, o lo que es lo mismo, Japoneses en lengua vasca, un tema que ha dado mucho que hablar en estas 48h, sobre todo cuando todas las miradas han estado centradas en ese país, un todopoderoso, muy altamente avanzado en lo que a tecnología se refiere pero ferozmente arrasado por un fenómeno natural que todos conocemos que lo ha sumido en una profunda ruina.
Ni hablaré del terremoto, ni del tsumani, ni de los destrozos, aunque sí he decir, que las imágenes que los medios de comunicación nos han transmitido estos últimos días, han sido verdaderamente espeluznantes y devastadoras.
Y de ellas extraigo la siguiente conclusión, de la que apenas se ha hablado y es como se ha comportado la gente, los Japonenses, ante tal desastre natural.
Sí, la gente actúa como si nada hubiera sucedido, en otros lugares del mundo, cuando ocurren este tipo de desgracias se ve a gente llorando, corriendo de un lado para otro, tristeza, desolación, peleas por la ayuda humanitaria, ...
En cambio, en Japón aun no he visto imágenes de este tipo, quizás porque aun no haya imágenes de ello, pero lo que sí me ha impactado ha sido la serenidad que existe en muchos de los pueblos arrasados por el terremoto;no se ven ni saqueos, ni robos, ni peleas a la hora de percibir la ayuda humanitaria, incluso países enemigos de Japón, como China y Corea, han ofrecido su ayuda y pondrán su granito de arena en tareas de ayuda humanitaria.
Tengo grabada en mi retina la imagen de ver una fila ordenada de japoneses afectados esperando pacíficamente la entrega de la ayuda humanitaria, que contrasta con las imágenes que recuerdo del pasado terremoto Haití o la de muchos pueblos del tercer mundo, a la hora de las entregas de la ayuda humanitaria. Es impresionante ver, este comportamiento ejemplar del pueblo japonés, ya podíamos todos ser así de pacientes y esperar de ese modo la ayuda que el resto del mundo ofrece en estos casos.
Esta es mi reflexión, aun tenemos mucho que aprender de estos países, que en mi opinión, nos llevan años-luz de ventaja en muchos aspectos y éste es uno de ellos.
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